Las personas pueden llegar a padecer depresión por varios motivos. Y de hecho es muy mal entendida, ya que hay quienes lo pueden llegar a confundir o señalar como simple tristeza. No es así, pero tampoco es el caso que vamos a estudiar hoy.
En este caso la pregunta es, ¿existe la depresión en loros? Pensar que estas aves que se la pasan hablando y gritando puedan pasar por este estado debería preocuparnos. Aprende más sobre este asunto.
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¿Existe la depresión en loros?
Lo que sucede con estas aves es que son bastante inteligentes y gracias a ello pueden terminar por experimentar una alta cantidad de emociones. Todo gracias a que pueden captar detalles de su alrededor y entorno.
Si, pueden llegar a deprimirse por razones como:
- Se encuentra enfermo
- Condiciones insalubres
- Aburrimiento o soledad
- Perdida de pareja
- Cambios de posición de la jaula
- Temperatura inadecuadas
La realidad es que gracias a cambios en el entorno tu loro puede llegar a sentirse miserable. Debes por lo tanto averiguar que lo está molestando para poder solucionarlo. Y de esta forma pueda recuperar su humor.
¿Y cómo puedo saber que se encuentra deprimido?
No es fácil de determinar a la primera, pero si existe una serie de comportamientos repetidos que pueden llegar a darnos pistas que algo no se encuentra bien.
- Plumas esponjosas: Suele pasar que cuando se encuentran incómodos por algo, esponjan sus plumas con frecuencia. Cuando las erizan se piensa que es una forma de evitar mostrar vulnerabilidad ante otros.
- Pérdida de apetito: Esta por si misma no te va a dar la pauta que se encuentra deprimido. Pueden ser muchos los motivos, pero en definitiva cuando vemos que pasa por esto es una señal que algo no anda bien con nuestra mascota.
- Desplumarse a si mismo: No confundirse con la muda de plumas, en este caso consiste al ave intentando quitarse las plumas por si mismo. Las arranca, en señal que se encuentra bajo mucho estrés.
- Se vuelve agresivo: posiblemente antes era un loro muy amigable, pero de repente pareciera haber cambiado por completo. Ahora siempre que metes la mano en la jaula te quiere picar, esto puede querer decir que no se siente bien.
- Verlo realizar movimientos repetitivos: Lo ves subir y bajar. Lo ves correr de un lado a otro. Mueve y mueve la cabeza. Esa repetición constante no es algo normal y en definitiva algo le está molestando.
- Sonidos nuevos y desagradables: El canto de un loro no es el de un ruiseñor, pero sabemos como es. Si lo oímos cambiar por uno más triste o más lastimero, puede ser una forma de estarse quejando.
¿Cómo puedo ayudarlo?
La respuesta es reaccionaria a saber que le sucede. Si por ejemplo su entorno le molesta, es experimentar con cambios que le hagan sentir a gusto. Tal vez había mucho ruido o un objeto lo asustaba.
Si se siente solo pueda necesitar pasar más tiempo contigo o al menos que se sienta atendido; podría ser que la jaula le esta quedando pequeña o probablemente sea hora de buscarle compañía para que no se sienta solo.
No hay una única respuesta, lo importante es saber observar a tu mascota para poder llegar a conclusiones.