5 trucos básicos que se le pueden enseñar a un gato

¿Has intentado enseñarle trucos a tu gato y no has tenido éxito? Y es que regularmente al pensar en enseñar algo así pensamos en los perros. Y por su carácter, podemos llegar a pensar que a los mininos no se le puede enseñar nada.

Los gatos son animales inteligentes y pueden aprender una variedad de trucos básicos. Eso sí, no suelen ser tan complejos como los enseñados a los caninos, pero sin duda hay varios que pueden llegar a conocer.

5 trucos que un gato puede aprender.

trucos básicos que se le pueden enseñar a un gato

Todos estos son relativamente sencillos, y de hecho algunos van a terminar además siendo útiles.

Sentarse

Este es un truco clásico en perros y también se le puede enseñar al gato de la casa.. Primero, haz que se siente frente a ti. Luego, levanta una golosina por encima de su cabeza, lo que hará que levante la cabeza y baje las patas traseras para mantener el equilibrio. Cuando esté en esta posición, dile «siéntate» y dale la golosina.

Dar la pata

¡Si! Uno de los más clásicos puede hacerlo. Primero, haz que se siente frente a ti. Luego, presiona suavemente su pata izquierda y di «da la pata». Cuando levante su pata, dale una golosina. Repite el proceso con la pata derecha.

Que vaya hacia ti.

El truco de «venir» es muy útil si necesitas que acuda a tu persona en determinado momento. Primero, haz que tu gato te siga por toda la casa. Luego, cuando esté cerca de ti, di «ven» y dale una golosina cuando llegue a ti. Repite este proceso varias veces al día para que aprenda.

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Acostarse

Este es otro muy interesante, haz que se siente frente a ti. Luego, toma una golosina y muévela lentamente hacia abajo, lo que hará que tu se acueste. Cuando ya esté acostado, di «acuéstate» y dale la golosina.

Saltar a través de un aro

Como imaginarás este ya es un truco más avanzado, pero muchos gatos pueden aprender a hacerlo. Primero, haz que tu gato se siente frente a ti. Luego, sostén un aro en el aire y di «salta». Dale una golosina cuando salte a través del aro. Repite este proceso varias veces al día hasta que tu felino aprenda.

Ten paciencia, mucha paciencia.

Algo que si vale la pena resaltar, es que su paciencia para aprender estos trucos es menor que el de un perro. Y no es que se le considere menos inteligente, se encuentra todo relacionado a su naturaleza.

Por lo tanto, no suelen aprender de manera tan sencilla. Habrá que tener mucha paciencia y cariño a la hora de enseñarles. Pero ten por seguro que al menos estos trucos sencillos podrán terminar por aprenderlos.

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