Como bañar a un gato sin pelo: el método paso a paso

Los gatos son animales adorables, pero es de todos conocido que no les gusta el agua. Por lo tanto, el tema de bañarlos siempre es llamativo. Sobre todo porque siempre tenemos en cuenta que ellos mismos se bañan.

Pero de vez en cuando es bueno ayudarlos un poco y lavarlos. Ahora bien, ¿Qué hacer si tienes un gato sin pelo, tiene algunas medidas especiales? Es por ese motivo que ahora conocerás como darles esa limpieza.

La forma de bañar a un gato sin pelo.

Existen muchos mitos sobre que los gatos odian el agua, aunque hay  mucho debate alrededor. Pero lo cierto es que es necesario darles limpieza en algunas ocasiones, sobre todo si fueron manchados de forma masiva.

¿Por qué deberíamos prestar especial atención a un gato sin pelo? El motivo es que ellos no poseen esa protección natural que brinda dicho pelo. Por lo tanto, si que requieren mayor cuidado de su piel para evitar irritaciones y mantener la piel limpia.

La preparación.

No son necesarios demasiados instrumentos, con tener agua tibia, una toalla suave, esponja y un recipiente amplio para colocarlo bastará. Ahora bien, en tiendas venden shampoo para gatos sin pelo, son especializados.

El problema es que la demanda es bastante baja a comparación de otros tipos de shampoo. Por lo que te invito a buscar en línea y encargar uno, por internet he visto que es mucho más fácil conseguirlo. De todas maneras, puedes buscar localmente primero.

Llévalo a un lugar tranquilo.

Toma en cuenta que como gatos que son, todo este asunto de bañarse les va a causar estrés. Por lo que deberás tenerlo en un lugar muy tranquilo, donde no vaya a recibir una sorpresa que lo vaya a alterar. ¡Incluso te podría rasguñar!

Lo mejor es llevarlo a una habitación cerrada, con temperatura agradable. Que no haya ruidos fuertes alrededor y también pide en tu casa que no vayan a entrar de golpe. Podrían asustar al gato, con fatales consecuencias (si, otra vez hablamos de rasguños)

Ve mojando al gato.

Lo más difícil es la primera ocasión que toca el agua. Con el agua tibia ve mojando gradualmente, con paciencia, sin forzar. Esta pasando por una “situación difícil”, así que no vayas a darle mucha agua de golpe.

Pon mucha atención en encontrar todas las zonas con pliegues, como las axilas. Son las zonas donde por lo regular se terminan por acumular mucho más las bacterias, por lo que sería un error dejarlas sin lavar.

Comienza a aplicar el shampoo.

Ya que esta mojado, comienza a recorrer su cuerpo con el shampoo. Deberás aplicarlo en la esponja e ir limpiando poco a poco. Una vez mas, te recuerdo no dejar las zonas con pliegues, ahí es donde están la mayor parte de las bacterias.

Luego de eso podrás enjuagar, pero NO le tires el montón de agua. Es necesario irlo haciendo poco a poco para irle quitando el agua. Asegúrate de no dejarle restos en las zonas con pliegues, porque eso puede causar complicaciones.

Seca y cepilla.

Una vez hecho eso, procede a secarlo con paciencia con la toalla. Y ahora procedes a cepillarlos. Y aquí te preguntarás que para que, si no tiene pelo. Y es que aunque no se vea, si por lo regular tienen muy poquito.

Esto permitirá que los aceites se esparzan y se haga un masaje al cuerpo. Como ves, no es complicado bañarlo, pero si hay que tener cuidado. Simplemente ten paciencia y podrás darle la limpieza adecuada.

Recomendaría limpiarlo al menos cada 3 meses, porque los gatos no les gusta y ellos tienen su propio método de limpieza diaria.