Las peleas entre gatos son de los más habitual. Los felinos son animales territoriales y también pueden llegar a pelear por una pareja. Por lo tanto, no es raro que un día estemos en nuestra casa tranquilos y oigamos que ya están peleando.
El problema radica cuando salimos y vemos que a nuestro gato lo están atacando. ¿Qué podemos hacer al respecto, podemos ayudar? Porque quisiéramos ayudar a nuestra mascota a poder escapar de la situación.
¿Se puede separar a dos gatos peleando?
Y es que pueden existir varias situaciones en donde batallen. Y no tiene que ser únicamente que venga un gato extraño a la casa, puede que tengamos más de uno por casa y de repente un día les entre el espíritu combativo.
En la mayoría de los casos simplemente con la presencia humana suelen huir. Los motivos por los que comenzó el combate suelen no ser tan profundos, y ante la presencia humana deciden que es mejor escapar.
Pero si la pelea va demasiado en serio, deberías pensarlo dos veces: un gato enfurecido puede ser altamente peligroso. Incluso aunque sea el tuyo, puede que en un momento de enojo te desconozca por completo.
Por lo tanto, jamás intentes separarlos directamente y en persona. Lo mejor que puedes hacer es arrojar algo entre ellos que termine por sacarlos del trance. Por lo general eso basta para que se vayan.
Puedes también utilizar un atomizador de agua o agua así en general. Ruidos potentes pueden funcionar, todo eso los sacará de su trance. No tardarán en interrumpir el combate que están teniendo.
Cómo lograr que las peleas habituales acaben.
Puede ser que separaste una pelea de un gato que entró a la casa. Pero puede ser que en realidad ambos sean tuyos y siempre terminen peleando. ¿Cómo hacer que se quiten la costumbre de pelear?
Toma en cuenta que la mayor parte de las peleas es por protección de recursos, que terminan por considerar de ellos. Entre estos podemos encontrar:
- La comida
- El agua
- La cama
- La arena
- Los juguetes y rascadores.
Una buena idea es tener más de uno de estos objetos en lugares separados de la casa. Esto evitará que puedan o intenten acaparar, ya que al haber más de uno en la casa, la sensación de escases debería desaparecer.
Si se pelean siempre en la misma zona, puede ser porque requieran más verticalidad. Es decir, lugares donde trepar para no encontrarse siempre en el piso, por lo que deberías colocar algunos muebles.
También es importante distinguir que sean peleas reales y no juegos, algunas características que muestran que es real son:
- Arquean el cuerpo y hacen las orejas hacia atrás
- Dan manotazos continuos al otro gato, intentando rasguñar
- Sonidos agresivos que por lo regular no escuchas.
Tome en cuenta que hay gatos que podrían jamás llevarse bien. En estos casos puede que necesite siempre tenerlos separados, reubicando cada uno en una zona. Pero esto hará a la larga difícil la convivencia.
Ya que uno de ellos puede escapar a golpear al otro en cualquier momento. Consulte con un veterinario sobre especialistas de la conducta, si nota que todos sus esfuerzos por hacer que se lleven bien no prosperan.