Los murciélagos son animales que causan mucho misterio e incluso temor entre las personas. No por nada son protagonistas además de muchas historias que no les hacen demasiado favor, ya que las deja mal paradas frente a la gente.
Pero eso sí, despiertan la curiosidad gracias a diversos comportamientos. Uno de ellos es el saber porque duermen de cabeza. Una forma que para cualquiera suena como algo incómodo, poco ideal para descansar.
Por qué los murciélagos duermen de cabeza
Este es un aspecto que los hace únicos. Para empezar, debes recordar que ellos son mamíferos. Por lo tanto, comparten muchos comportamientos con otros seres peludos del mundo, que conoces perfectamente.
Pero estos pasan la mayor parte de su día, o mejor dicho, de su vida, colgados de cabeza. Esta posición resultaría altamente incómoda para otros seres, porque su sangre se estaría acumulando en la cabeza de manera constante.
En su caso, su anatomía les permite optar por esta posición de manera perfecta sin tener problemas. Pero, ¿por qué están así, les resulta cómodo?
Sí que les resulta cómodo, porque esa es su naturaleza. Pero más que nada, les resulta útil. Ya que recordarás también que son los únicos mamíferos voladores.
Pero su cuerpo es bastante peculiar, ya que a ellos les da mucha dificultad emprender el vuelo. No es como un pájaro que se encuentra en cualquier sitio, que simplemente pliegan sus alas y salen hacia el cielo.
En cambio para los murciélagos esto no es fácil. Por lo tanto, al estar de cabeza ya están en el aire, lo que les permite emprender vuelo en cualquier momento.
Vale la pena aclarar que los murciélagos sí podrían volar desde cualquier otra posición. Pero esto es un despegue muy lento y poco ágil, lo que podría llegar a costarles la vida. Por lo tanto, prefieren estar de manera permanente en una posición de mayor ventaja.
¿No les resulta cansado o incómodo?
Para nada. Eso es porque estamos pensando si fuéramos nosotros quienes estuviéramos colgados ahí. Pero su fisionomía está creada para sostenerse ahí por periodos muy largos de tiempo.
Sus patas están listas para resistir el peso de manera cómoda durante todo el día. Para ellos no es un esfuerzo, lo más probable es que sea lo mismo para ti que estar sentado en una silla.
Y no solo se encuentran de manera estática esperando el momento para volar. En realidad hacen gran parte de su vida ahí arriba, realizando actividades como comer o incluso la crianza de sus hijos.
A la hora de dormir, harán uso de los tendones de sus dedos, los cuales son muy fuertes. Pero que a la vez, una vez que se han colgado, permiten que el resto de su cuerpo se relaje, para descansar sin tensión.
Recuerda, son mamíferos, no son como las aves que poseen unos huesos huecos ni nada por el estilo. Solo que por sus características únicas vuelan, algo que pueden hacer mucho mejor si pasan su vida al revés, esperando el momento de salir rápido.