La caza furtiva ocurre cuando los cazadores realizan esta actividad de manera ilegal, matando y capturando animales que se encuentran protegidos por la ley. Por lo tanto, se les considera criminales que han roto las reglas.
Algunos animales se encuentran en lugares protegidos o al menos vigilados por las autoridades. Pero un cazador furtiva buscará la manera de poder infiltrarse para poder hacerse con algunos de los animales.
¿Cuándo ocurre la caza furtiva?
Existen animales en la naturaleza que pueden ser cazados sin que nadie pueda decir nada. Si bien estos espacios existen cada vez menos, si hay algunos animales listados que no hay una regulación en específico.
Por lo tanto, pueden ser cazados libremente para consumo propio. Esto pasa por ejemplo en muchos lugares donde existen todavía tribus, que para cazar por lo regular lo hacen de forma tradicional y en cantidades pequeñas.
En cambio, los cazadores furtivos se adentran en un terreno ilegal, ya que los animales que cazan por lo regular se encuentran protegidos. Lo hacen ya que sus precios en el mercado negro suele ser alto.
Aunque también hay quienes entran a cazar por la simple emoción de romper las reglas. Saber que es algo que no deberían hacer y aún así se ponen en modo cazador. Por lo tanto, es por una percepción mal entendida del deporte.
También hay que tomar en cuenta que existen otras circunstancias por las que puede haber caza furtiva. Por ejemplo, los nativos entrando a cazar a una zona protegida, todo para poder obtener algo de alimento.
En su caso no lo hacen porque quieran quebrar la ley (incluso pueden desconocerla) o porque vayan a sacar un provecho animales. Pueden simplemente querer cazar y comer de un terreno que podría haber sido libre por generaciones enteras.
Es deber de los gobiernos saber distinguir entre los distintos tipos de cazadores, porque estos grupos indígenas no están haciendo nada moralmente cuestionable. Por lo que sería mejor buscar formas de apoyarlos.
Consecuencias de los cazadores furtivos.
Estos animales se encuentran protegidos por diversas razones, entre las que se puede encontrar en peligro de extinción. En algunos casos podrían haber muy pocos ejemplares en el mundo, uno menos es peligroso.
A veces se encuentran en esa zona con la esperanza de poder reproducirlos en el futuro, por lo que necesitan tiempo y paz para ello. La aparición de los cazadores interrumpe ese ciclo, haciéndolo todavía más difícil.
Y también pone en peligro a los trabajadores, porque estos cazadores suelen estar armados y ser violentos, por lo que pueden llegar a darse enfrentamientos con los empleados que se encargan de cuidar estas zonas.
Esto al mismo tiempo causa un clima de poca paz en la región, haciéndolo un lugar más difícil de vivir para los animales. Y es común que los gobiernos no den recursos suficientes para cuidar estas regiones.
Es difícil crear conciencia en los cazadores furtivos, porque conocen bien lo que hacen. Pero nuestro deber es dar a conocer esta información y sobre todo, no consumir el producto que resulte de sus robos o atracos.