Síntomas y causas de estrés en conejos, así como evitarlo

El estrés es un problema por el que pasamos las personas a diario. Siempre con algo pendiente que nos quita el sueño, algún lío de fondo en el que no dejamos de pensar. Estar estresado no es bueno para el cuerpo.

Pero no somos los únicos, los animales también sufren estrés por problemas de ellos. Pero entre todos vamos a centrarnos en el conejo. Ya que es un animal particularmente sensible y que puede llegar a sufrirlo.

Se piensa que en gran medida es heredado por lo que sufrieron sus antepasados, al ser animales que por lo regular son cazados y quedar indefensos ante sus perseguidores. Y al no ser fuertes, no pueden defenderse.

Signos más comunes del estrés en conejos.

Para poder reconocer que tienes un conejo estresado, algunos signos son:

• Encontrarse excesivamente nervioso todo el tiempo.
• Volverse de repente muy agresivo, no dejarse alzar o agarrar como siempre.
• Perder interés en la comida, incluso de sus platillos favoritos.
• Tener una respiración pesada y también agitarse de manera muy sencilla.
• Verlo hacer ruidos de manera habitual, como distintos tipos de gruñidos.
• Tener los ojos muy abiertos y saltones, o las orejas tiradas para atrás.
• Tomar la costumbre de estar golpeando de manera habitual el piso.
• Tirar de su propio pelo, realizar un acicalamiento exceso y demasiado rudo.
• Otro tipo de comportamiento extraño, como dar vueltas en su lugar.

Hay que tomar en cuenta que todos estos son signos probables de estrés, pero también podrían ser resultado de tener algún tipo de enfermedad de fondo. Por lo que se sugiere llevarlo al veterinario para una revisión.

¿Por qué un conejo quedaría estresado?

No existe una sola causa, puede ser cualquiera. Pero para eso hay que volver a entender lo dicho: son animales que han sido cazados durante toda su vida, por lo que incluso en su genética se encuentra el miedo a todo.

Por lo que si en tu casa hay mucho ruido, la entrada de un nuevo tipo de animal, cambio de lugar, etc… puede causar ese tipo de cambios. Pero aquí encontrarás algunos que podrías no haber tomado en cuenta.

Cambiar algo de manera repentina.

Existen personas con miedo al cambio, porque les provoca inseguridad. Pues los conejos suelen ser bastante sensibles a esto. No les gusta tener que acostumbrarse a algo nuevo, les gusta estar en confort.

Si cambias de lugar los muebles, o peor aún, cambias de residencia, para ellos puede ser causa de estrés. Si vas a realizar un cambio muy fuerte en tu hogar, ten paciencia con tu conejo y ayúdalo a tranquilizarse.

Estar abrumado de confinamiento.

Otro aspecto es que podría estar desesperado de estar enjaulado. A veces podemos dejarlo guardado en un espacio pequeño por demasiado tiempo, tanto así que comenzará a sentirse desesperado.

Hay animales que pasan mucho tiempo encerrados y lo resisten mejor, como algunas aves. Pero en el conejo le afectará demasiado, por lo que deberás evitar que quede aburrido. Déjale salir con frecuencia, para evitar esto.

¡Demasiado ruido a su alrededor!

También podría ser porque recibe demasiados estímulos en forma de ruidos. Si te encuentras en un ambiente ruido, con ruidos de máquina, arrastrar de muebles, gritos de niño, etc…todo eso podría alterarlo.

Para ayudarlo deberás de cambiarlo a un sitio mucho más tranquilo, más silencioso. En donde pueda estar descansando sin tener estos ruidos repentinos que lo sobresalten y tengan en alerta permanente.

Como ves, son animales delicados y fáciles de poner nerviosos. Busca constantemente tenerlos contentos y tranquilos, y una vez más, antes de pensar que simplemente está estresado, preguntar a un veterinario puede ser una buena idea.